domingo, 7 de septiembre de 2014

Cómo superar el mal de la impuntualidad

Hemos mencionado muchas veces la importancia de ser puntuales. Esta habilidad puede marcar una gran diferencia en tu carrera. Directores, productores e ingenieros de audio nos han afirmado que la puntualidad de un actor puede llega a ser el factor determinante entre darle un personaje relevante o no. Las pautas entre los distintos actores son muy ajustadas entre sí. Basta que uno llegue tarde para que pueda ocurrir un efecto dominó en el que hay que correr el resto del día. Además la impuntualidad puede indicar poco compromiso y respeto por el tiempo de los demás.
En esta entrega  de Voces Detrás de las Voces hemos ido más allá porque creemos que para la persona que no es puntual se trata de un problema más complejo de lo que puede parecer a simple vista. Así que investigando nos hemos encontrado con un estudio de la Universidad de San Francisco de Diana Delorzon donde clasifica a las  razones para ser impuntuales de la siguiente manera:

·      Mala percepción del paso del tiempo: Estás terminando de realizar un tarea que crees que te está llevando apenas 10 minutos y cuando miras el reloj ya han pasado 25 y comienzas a correr (una vez más) para tratar de llegar a tiempo.

·      Subestimar el tiempo que tardarás haciendo algo: No es realista pensar que vas a bañarte, vestirte y cocinarte en 8 minutos.  O si tuviste suerte alguna vez en la que era día de fiesta, no había tráfico y no encontraste ningún semáforo en rojo y llegaste a tu trabajo en 11 minutos no es realista calcular ese tiempo siempre sabiendo que en un día normal puede llevarte 20 minutos llegar de tu casa a tu trabajo.

·      El tiempo y el “pensamiento mágico”: Los impuntuales suelen ser exageradamente optimistas. Y creen que mágicamente resolverán una tarea de 2 horas en apenas 1. Es
verdad si se cree con el corazón cosas maravillosas ocurrirán pero modificar el tiempo no es una de ellas.

·      Distraerse fácilmente: Muchas veces las personas que luchan con el tiempo, en otras áreas de su vida pueden  distraerse fácilmente o no culminan proyectos porque necesitan una motivación mayor o esa adrenalina de llegar a tiempo. También pueden tener la creencia de que bajo presión funcionan mejor.

·      Querer hacer demasiado:  La necesidad de aprovechar hasta el último minuto en ser productivos puede llevar a hacer que no calculemos bien los imprevistos que pueden ocurrir o seamos muy optimistas respecto al verdadero tiempo que puede llevarnos hacer algo.

·      Querer resaltar: A veces podemos desear enviar un mensaje claro, bien sea que somos rebeldes y tenemos nuestros propios tiempos al margen de la sociedad o demostrar poder obligando a otro a que no espere.

Todas estas razones para ser impuntuales no son más que creencias que podemos tener en nuestro sistema. Una creencia es algo que está muy arraigado en nuestro subconsciente pero una vez que se identifica se puede trabajar y mejorar si está afectando nuestro trabajo y nuestra vida. Un buen comienzo para mejorar nuestro manejo del tiempo puede ser seguir estos consejos:
·      Calcula llegar a tu cita 15 minutos antes. Si alguien se verá contigo a las 2 agéndalo física y psicológicamente a la 1:45.
·      Lleva contigo siempre formas de aprovechar el tiempo si llegas muy temprano: siempre será productivo llevar tu ipad y adelantar algo de trabajo o leer ese libro que tienes pendiente.
·      Tómate un día para conocer cuánto tiempo REAL te lleva hacer una tarea: Llevar un reloj mientras se realizan acciones de rutina y tomar nota hará que calcules mejor tus estimados. Te sorprenderá saber que cocinar algo sencillo puede llevarte hasta media hora y no 8 minutos como creías.
·      Ten una agenda organizada: Tener una agenda en la veas por escrito y por adelantado todas tus tareas pendientes hará que te planifiques mejor y evitará que te comprometas en cosas que no vas a tener tiempo de realizar.
·      Convierte el ser puntual en algo que defina tu integridad: No seas puntual solo porque  tu madre o tu maestra te decían que era bueno serlo. Convierte el tema de  la puntualidad en una característica que te defina como un ser integro y que entiende que el tiempo de los demás es valioso porque no lo pueden recuperar.

“Nunca podría haber hecho lo que he hecho sin los hábitos de la puntualidad, orden y diligencia, sin la determinación de concentrar en mí un objetivo a la vez” Charles Dickens

¿Crees que debes trabajar en tu puntualidad? Pues ¡el mejor momento para comenzar es ahora!

Cuéntanos si te hemos ayudado o si te gustaría añadir algo más basado en tu experiencia.

VDV

#TuVozVale

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